La envidia y sus males

Hechicerías y sus problemas.

La maldad de algunas dietéticas;

Esta es la historia del mal que sufrió una mujer en su negocio de dietética:

Esta mujer es una persona amable amorosa, empática y cordial, su forma de ser era espiritual. Tenía su propio negocio de dietética, era muy optimista, intuitiva, hábil para los negocios y amaba su trabajo. 

Su primer local estaba en lugar menos concurrentes de clientes, tenía buenos precios, su factor importante. Comenzó a progresar, trasladándose otro lugar para captar más clientes y por ultimo logro trasladares en un local con mayor concentración de clientes. Cada vez que se mudase de local, un mes antes les avisaba a sus clientes la nueva dirección de su nuevo local.

En enfrente tenía una competencia pobre de productos dietéticos, no era 100% negocio de dietética.

En su local podrías encontrar de todo. Su nuevo local comenzó a crecer económicamente, su comercio comenzó a captar más clientes y siempre estaba lleno de clientes en espera, tenía personal que la ayudaban.

Hasta que llego la crisis coronavirus, comenzó a tener menos clientes y ella imagino que todo era el resultado de la crisis económica de la sociedad. Ya ni venían sus clientes como antes. Era joven, estaba envejecida, demacrada energéticamente.

¡Que pasó entonces?

Sucedió que la envidia de la persona de la dietética del frente de su local, había mandado a hacer una brujería a su comercio para que quiebre su negocio. A través de ese trabajo de brujería le mandaron a su local unos bichos horribles (entidades), para que no dejase entrar a los clientes y así con el tiempo terminaría cerrando las persianas de su local.  Así la persona del local del frente captaría todos sus clientes y se beneficiaría económicamente.

En verdad esta persona es espiritual, fue una víctima de hechicerías de la envidia, a través de esa causa sufrió mucho y tuvo que soportar los ataques de esas entidades que la estaban perjudicando negativamente a nivel espiritual, emocional, económicamente y a su salud.

Bueno como dice el refrán el que mal lo hace, mal lo paga.

Ella y su negocio quedaron liberados de mal y como las leyes de causa de efecto todo lo que la que perjudicaba volvió a su origen.

Ten cuidado de tus miradas, ya detrás de ella puede yacer la envidia.

Chamán de Luz.